nº 90 viernes. 24 de junio de 2004

Confundir molinos con gigantes no pertenece en exclusiva al atribulado Don Quijote. El protagonista de la novela de Cervantes es el referente literario de multitud de idealistas que sueñan, soñamos? con empresas mayores. Historias poéticas en las que no hace falta atenerse estrictamente a la verdad de los hechos. 
DELIRIO DEL QUIJOTE
No eran de viento los molinos, Sancho, sino de tiempo. Ha sido desigual la pelea, tan difícil. Las aspas giraban hacia arriba, indiferentes, y yo minúsculo abajo, en su sombra. Eran de tiempo, Sancho, grandes conos erguidos y en la cima un remolino indescifrable. Hubiera podido ganar la batalla pero equivoqué las armas y ahora me hundo. Déjame ver tu cara que perderé también y arriba busca sólo el sol, porque no hay molinos de viento, Sancho.
Miguel de Cervantes

1 comentario:

Anónimo dijo...

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