Como hoy es un "viernes" especial, para explicar el espíritu de esta revista, de los que colaboran con ella y de los que la leen una poesía de Pablo Neruda que much@s de vosotr@s conocéis porque ya ha inspirado otras aventuras.

¿QUIÉN MUERE?

Muere lentamente quien se transforma en esclavo del hábito,
repitiendo todos los días los mismos trayectos, quien no cambia de marca,
no arriesga vestir un color nuevo y no le habla a quien no conoce.

Muere lentamente quien hace de la televisión su gurú,
quien evita una pasión, quien prefiere el negro sobre el blanco
y los puntos sobre las "íes" a un remolino de emociones,
justamente las que rescatan el brillo de los ojos, sonrisas de los bostezos,
corazones a los tropiezos y sentimientos.

Muere lentamente quien no voltea la mesa cuando está infeliz en el trabajo,
quien no arriesga lo cierto por lo incierto para ir detrás de un sueño,
quien no se permite por lo menos una vez en la vida, huir de los consejos sensatos.

Muere lentamente quien no viaja, quien no lee, quien no oye música,
quien no encuentra gracia en sí mismo.
Muere lentamente quien destruye su amor propio, quien no se deja ayudar.
Muere lentamente, quien pasa los días quejándose de su mala suerte o de la lluvia incesante.
Muere lentamente, quien abandona un proyecto antes de iniciarlo,
no pregunta de un asunto que desconoce o no responde cuando le indagan sobre algo que sabe.

Evitemos la muerte en suaves cuotas, recordando siempre que estar vivo
exige un esfuerzo mucho mayor que el simple hecho de respirar.
Solamente la ardiente paciencia hará que conquistemos una espléndida felicidad.

Pablo Neruda

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Que bueno!!!
armemonos todos de "ardiente paciencia"...

SoniaPT

Anónimo dijo...

qué pena que de vez en cuando se nos olvide lo que dice esta poesía!!!!
tengamos siempre presente que tenemos que ser parte activa en nuestra felicidad.