Anagrama
Vila-Matas vivió en París en una buhardilla que le alquilaba
Marguerite Duras. Esto es cierto. Y tal vez es cierto que en algún momento
persiguió la biografía de Hemingway. Del resto, no sé qué parte es
autobiografía y cuál ficción. Lo cierto, es que gracias a los consejos de su
casera (o quizás gracias a su talento y tenacidad) ha conseguido ser uno de los
mejores escritores españoles vivos. Y el libro se consideró uno de los mejores
publicados el año pasado (ahora se exhibe por cierto en las librerías de
París).
Por el libro no sólo pasa la Duras. También pasa Paloma
Picasso, Isabelle Adjani y hasta el propio Miterrand. Pero no nos llamemos a
engaño. No es un sofrito de celebridades. El libro es literatura de la buena.
Ana Ruiz
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