Almudena Grandes
Editorial Tusquets
Primera premisa antes de leerlo: no se puede comparar. Es otro libro. Y ya está. El que busque la segunda edición de "Los aires difíciles" se desilusionará. Pero Almudena Grandes -que dedica el libro a Luis (un viejo amigo de K.H.) medio millón de veces- ha escrito un libro de los que apetece leer.
El tema, extraordinariamente recurrente en la literatura (triángulo amoroso), es llevado a su máxima expresión. El libro empieza por el final. Así que no hay tensión narrativa. Esta vez, la escritora decide que no quiere dedicarse tanto al argumento.
No es fácil hacer creíbles las situaciones extremas. No es fácil describir los escenarios que conducen a las mismas, inventar los diálogos cotidianos, dibujar una época (esta vez la de los 80). Y cuando todo esto hay que enmarcarlo en un ambiente de artistas que intentan ser excéntricos, pero que al fin sucumben a las grandes servidumbres del género humano, la credibilidad se ve más comprometida.
A.G se había puesto el listón muy alto. Y no llega a superarlo. Ella, se defiende mejor en extensiones superiores dónde remata la identidad de sus personajes. Pero no pasa nada. El libro es entretenido, es divertido y está bien escrito.
Ana Ruiz
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