PLAÇA DE SANT JOSEP ORIOL. Barrio Gótico.
Recomiendo llegar a ella Rambleando, esto es paseando por La Rambla, la calle más bonita, 
emblemática y cosmopolita de la ciudad. Justo a la altura del Liceo y de esa especie de gran bazar que sigue siendo el mercado de la Boquería hay que torcer a la izquierda, coger Cardenal Casañas y al final, después de pasar por la bonita Plaça del Pi, colindante con ella, llegaremos al lugar. En la Plaza Sant Josep Oriol hay que sentarse en la terraza del mítico café del Pi, tomarse lo que a uno le venga en gana y simplemente limitarse a observar. Veremos desfilar por ella la vida misma de la ciudad, que es sin duda para mi lo realmente atractivo de la vida en la gran urbe: gentes de barrio, carteristas y maleantes varios, oficinistas, guiris por un tubo, inmigrantes buscavidas.... y todo ello con música de fondo, música a veces de jazz, de rock and roll, baladas o tangos argentinos o lo que al iluminado de turno le haya dado por tocar ese día. Es el lugar donde siempre llevo a los que llegan a Barcelona, donde me gusta ir con my wife, donde quedo con cualquier buen amigo, o simplemente me gusta ir solo, tomarme allí mi caña (sí, Gonzalo lo reconozco, a años luz de las que se echan en Madrid !!) y la verdad es que cual sesión catártica, se suele salir siempre mejor de lo que se ha entrado. Os lo recomiendo, en el corazón de la city, en pleno barrio Gótico, no os defraudará !!
emblemática y cosmopolita de la ciudad. Justo a la altura del Liceo y de esa especie de gran bazar que sigue siendo el mercado de la Boquería hay que torcer a la izquierda, coger Cardenal Casañas y al final, después de pasar por la bonita Plaça del Pi, colindante con ella, llegaremos al lugar. En la Plaza Sant Josep Oriol hay que sentarse en la terraza del mítico café del Pi, tomarse lo que a uno le venga en gana y simplemente limitarse a observar. Veremos desfilar por ella la vida misma de la ciudad, que es sin duda para mi lo realmente atractivo de la vida en la gran urbe: gentes de barrio, carteristas y maleantes varios, oficinistas, guiris por un tubo, inmigrantes buscavidas.... y todo ello con música de fondo, música a veces de jazz, de rock and roll, baladas o tangos argentinos o lo que al iluminado de turno le haya dado por tocar ese día. Es el lugar donde siempre llevo a los que llegan a Barcelona, donde me gusta ir con my wife, donde quedo con cualquier buen amigo, o simplemente me gusta ir solo, tomarme allí mi caña (sí, Gonzalo lo reconozco, a años luz de las que se echan en Madrid !!) y la verdad es que cual sesión catártica, se suele salir siempre mejor de lo que se ha entrado. Os lo recomiendo, en el corazón de la city, en pleno barrio Gótico, no os defraudará !!Joe
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